El agua es una necesidad primordial. Y el tenerla al alcance de la mano presenta varios retos: primero que nada, está habiendo muchos desabastos en regiones de todo el mundo. Una solución es almacenar agua.
Este es un asunto que desde tiempos antiguos ha preocupado a la Humanidad; muchas de las grandes construcciones antiguas se enfocaron en cuidar y transportar el agua de manera segura por las ciudades.
Esto es algo que con los siglos se ha seguido mejorando e implementando. Ahora sabemos, por ejemplo, que el agua no solo tiene que estar almacenada sino también protegida de agentes contaminantes. Sean más gruesos, como pudieran ser minerales, o sean más indetectables como las bacterias.
Es por eso que el proceso de almacenado ha evolucionado en ofrecer opciones que mejoren ese aspecto. Además de que ahora hay diferentes tipos de mecanismos de almacenaje que se adaptan al lugar dónde se vaya a necesitar el agua.
¿Cuáles son las formas de almacenar agua?
Tabla de contenido
En general podemos hablar de tanques. Tanques de agua que alimentan a un lugar. Pero estos pueden venir en tres formas principales: los tinacos, las cisternas y los tanques para trabajo industrial.
De inicio los tinacos son estos tanques que se colocan, usualmente, por encima de las casas para aprovechar la gravedad y que esta ponga más fuerza a la presión del agua que será utilizada.
Hay de diferentes capacidades, entre 450 y 2500 litros, pero estos funcionan más bien para un hogar o una oficina muy pequeña.
Luego, están las cisternas. Estas son tanques que usualmente se colocan por debajo del nivel de piso, las cuales pueden tener capacidades inmensas como para proveer de agua a todo un edificio u oficina grande o conjunto habitacional.
Como el agua suele estar abajo, para subirla se necesita la ayuda de una bomba de agua que empuja el líquido hacia lo alto, o incluso a un tinaco auxiliar, para que el agua baje con el mismo peso de la gravedad.
Finalmente, los tanques de la industria suelen ser un poco más herméticos y pueden estar hasta cerrados por completo, dependiendo del trabajo y del líquido para el que se necesiten.
¿En qué consiste un tinaco?
Como ya te contamos, los tinacos son tanques que usualmente se enfocan en uso hogareño. No tienen una capacidad grande para almacenar agua en cantidades inmensas: miles y miles de litros.
El cálculo de qué capacidad de tinaco necesitas es simple, aunque siempre es mejor que sea realizado por un experto. Se suele decir que una persona al día consume cerca de 100 litros de agua, entonces si en la casa viven tres personas, un tinaco de 450 litros bastará y sobrará.
Los tinacos suelen requerir limpieza cada cuanto tiempo y está la puede realizar un profesional o, con las instrucciones correctas, tú mismo.
Usualmente en el interior de los tinacos hay una bomba flotadora que está conectada a la corriente de agua. Esta es la que dirige, por así decirlo, cuándo entra y cuándo no entra el agua al tinaco.
Funciona con una palanca que al levantar la pieza flotadora, sea una boya de plástico o de cualquier otro material, acciona un interruptor que impide que ingrese más agua al interior. También suele traer una válvula, por la parte exterior, que permite cerrar el paso por si se le realiza mantenimiento.
Finalmente, también puede agregarsele un filtro que impide el paso de partículas grandes que puedan venir en el agua.
¿Cuándo necesito una cisterna?
Una cisterna de agua es necesaria en diversas situaciones, principalmente para almacenar agua. En áreas con escasez de agua o donde el suministro es irregular, una cisterna proporciona una reserva de agua para uso doméstico o comercial. También es esencial en lugares donde el acceso al agua potable es limitado o costoso, permitiendo la recolección y almacenamiento de agua de lluvia. Además, las cisternas son útiles en casos de emergencia, proporcionando un suministro de agua seguro durante cortes de energía o desastres naturales. Asimismo, en zonas rurales, donde no hay conexiones de agua municipales, las cisternas son vitales para abastecer a las comunidades.
Las cisternas son más utilizadas para edificios o construcciones grandes que requieran una constante fuente de agua en grandes cantidades. Usualmente se colocan por debajo del suelo. Como el agua no puede subir por sí sola, a la cisterna se le puede colocar una bomba de agua que, al transformar la energía eléctrica en cinética, levante con presión el líquido para que llegue al techo.
Una vez ahí, la misma gravedad hará que el agua baje con presión a todos los puntos del sistema hidráulico de la construcción.
¿Cómo saber qué método necesito para almacenar agua?
Siempre recomendaremos la asesoría de un experto que observe la construcción en la que tiene que realizarse el sistema hidráulico. Sin embargo, hay cosas que pueden calcularse a simple vista.
Si tu hogar es pequeño, no necesitas una cisterna. Con un tinaco es suficiente. Pero si tu hogar es grande, o forma parte de un complejo de más casas, necesitan hacerse cálculos que incluyan cuantas personas estarán compartiendo el espacio, para saber cuánta agua puede estarse utilizando.
En Aquaplas podemos brindarte asesoría sobre estos temas. Es cuestión de que nos contactes a través de nuestra página web o de nuestras redes sociales. ¡Estarás en buenas manos!